Por Luis Fernando Rosas
Director IDT
En la Constitución Política de Colombia de 1991 se
lee: “la cultura en sus diversas manifestaciones es el fundamento de la
nacionalidad”. Este postulado convoca a responder a Los habitantes de Bogotá, a
partir del reconocimiento de la cultura MUISCA y la formación de niños, niñas y
jóvenes de los Colegios Distritales “AMIGOS DEL TURISMO”.
Esa es la tarea y el trabajo que un grupo
interdisciplinario de profesionales del Instituto Distrital de Turismo
liderados por Adriana Iza viene desarrollando en el primer semestre del 2012 y
que cobija las localidades de Santa Fe, Usaquén, Tunjuelito, Teusaquillo, Bosa
y La Candelaria entre otros.
Es un ejercicio pedagógico-educacional que ha
comenzado a dar sus frutos en el desarrollo individual y colectivo de hombres y
mujeres con un alto sentido de pertenencia de Bogotá, quienes respetan
sus tradiciones populares y rinden homenaje permanente a la cultura MUISCA,
-población indígena cuyo legado- está representado en el respeto a la
naturaleza y el agua.
En otras palabras, el programa “COLEGIOS AMIGOS DEL
TURISMO” le abrirá las puertas a la nueva generación de bogotanos (de
nacimiento y adopción), al igual que sus gestores y protagonistas (profesores y
equipo asesor del IDT) -a reconocer la ciudad- a partir de sus recursos
humanos, naturales y posición geográfica de las 20 localidades de la capital.
Es decir. Es un proyecto más que ambicioso;
formativo y ampliamente participativo: columna vertebral de la “Bogotá Humana”.
Así por ejemplo, se podrán tomar decisiones
precisas frente a la elaboración de planes y proyectos en busca de mejorar de
manera permanente la prestación de los servicios turísticos de Bogotá -que hoy-
se encuentra en la mira de la opinión pública y los ciudadanos del mundo.
Los invitamos niños, niñas, jóvenes, padres de
familia, profesores (primaria y secundaria) y ciudadanos de los cuatro puntos
cardinales de Bogotá, a sumarse al proyecto COLEGIOS AMIGOS DEL TURISMO, para
que conozcamos el verdadero valor cultural, histórico y natural de la capital,
alimentando de paso un alto sentido de pertenencia y amor por esta tierra,
donde vivimos.
Para amar a la ciudad, es necesario aprender de los
tesoros tangibles e intangibles que heredamos de nuestros antepasados MUISCAS,
que reconocemos en el siglo XXI como nuestro patrimonio.
En mi calidad del IDT los exhortó a que fortalezcamos
el significado de habitar en Bogotá, asumir el papel de GUARDIANES DEL TURISMO
y retransmitir ese mensaje desde las aulas de los COLEGIOS AMIGOS DEL TURISMO a
nivel local, regional, nacional e internacional.
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